martes, 27 de noviembre de 2012

Porque Nunca Tendré Una Hipoteca

  Todo empieza desde la infancia, nos educan para ser buenos, educados, seguir las reglas, aprender a convivir y a ser un miembro productivo de la sociedad. Si hablamos en clase sin levantar la mano, nos castigan, si no hacemos las cosas según lo establecido también nos castigan.
  Está claro que en una sociedad donde tenemos que convivir equis miles de millones de personas, es necesario un orden para que todo funciones, y hasta ahí el modelo de sociedad es necesario.
  Pero que pasa cuando nos educan para no pensar, no inculcan que tenemos que ser buenos mecánicos  profesores, médicos  ingenieros, y un largo etcétera de profesiones existentes en el modelo de la profesionalización que existe en el mundo actual.
  Pero hay una cosa que no nos enseñan, y es para que podemos utilizar el dinero, como funciona esa parte del juego, la mayoría de nosotros pensamos que el dinero sirve para pagar la hipoteca, el préstamo del coche, la factura del móvil  la gasolina y por que no, la fiesta del fin de semana. Lo peor de todo ésto es que creemos que todas éstas elecciones las hacemos nosotros y no creo que eso sea así.
  A mí, que me gusta hacer las cosas de manera diferente, se me ha criticado muchísimas veces por no hacer lo que hacen los demás  por no querer llevar la misma vida que lleva el resto. Pero realmente, quien te critica, solo lo hace porque no haces lo mismo que el, pero ni esa persona sabe porque actúa así.
  Tal y como veo las cosas, me da la impresión de que nos intentan programar para que actuemos como unos cuantos quieren, para que nos levantemos cada día a las 6 de la mañana a trabajar, día tras día durante 70 años sin plantearnos porque lo hacemos, aunque de eso no somos conscientes porque no auto engañamos,  unos creemos que lo hacemos por nuestros hijos, otros para pagar las deudas, otros para tener una vida mejor, pero yo creo que no es por eso, creo que es porque actuamos bajo unas reglas que nosotros no hemos elegido.
  Si volvemos al colegio, vemos a aquel niño marginado porque sus padres no tienen dinero, y él no puede llevar zapatillas de marca, como los demás, o porque lleva el chándal con una brecha que ha sido cosida mil veces, desde mi punto de vista, aquí empieza todo. Los niños sufren en la tele un bombardeo constante de publicidad de las que las lecturas siempre suelen ser, éste es el juguete de moda, si no lo tienes seras un pringado, éstas son las mejores zapatillas, di a tus padres que te las compren si quieres ser el mas guay.
  Creo que si desde pequeño nos inculcan ésto es difícil salirse de ahí cuando somos mayores, tenemos en mente que si no llevamos un polo de una determinada marca no somos nadie, o una gran casa con piscina en una conocida urbanización, o el deportivo de moda. Envidiamos a quien posee todas estas cosas, porque nos han inculcado que ese tipo de gente es la mejor, y hasta ahí no hay mucho problema, el problema viene cuando hay que plantearse que estamos dispuestos a hacer para conseguir todo ésto, a cuantas personas pisotearemos para sentarnos a diario en un gran despacho, tomar café de una gran marca, llevar trajes que a tus empleados les costaría años poder comprar.
  Así funciona el sistema, pero me pregunto quien ha inventado todo ésto, ¿Es innato del ser humano ser así?
  Yo empiezo a pensar que hay alguien moviendo los hilos detrás de todo ésto, porque al fin y al cabo, el que esta arriba del todo no puede ser tonto, y probablemente no confie mucho en la suerte.
  En ésta crisis ha quedado demostrado que no solo los pobres sufren, han perdido sus casas desde banqueros, médicos  promotores, empresarios, mecánicos,  cajeros y un largo etcétera no ha podido hacer frente a sus pagos y han perdido desde sus coches, a sus casa, empleos, e incluso parejas, porque en las malas ya no nos queremos tanto.
  La mayoría de nosotros somos empleados cualificados de algún sector, somos verdaderos especialistas en nuestro trabajo y eso esta muy bien, pero cuantos de nosotros sabemos algo acerca de como funciona el mundo? Aquí es donde esta el problema, nuestros abuelos no sabían ni leer ni escribir, eran analfabetos la mayoría  lo curioso es que nosotros también,  personas muy inteligente, con años en las mejores universidades que pierden sus empleos y todo lo que ello conlleva por no saber absolutamente nada de economía.
  Que nadie se sienta estúpido  al fin y al cabo, el juego, esta hecho así, quien mueve el mundo, no sabe de medicina, ni de ingeniería naval, ni de química,  ni sabe como cambiar la batería a su coche, para todo ésto, nos tiene a nosotros, lo que si saben, es como hacer que trabajemos muchas horas al mes, por el sueldo mínimo posible, y eso, lo hacen muy bien.
Durante años nos han metido por los ojos, tarjetas de crédito de todos los colores, prestamos diversos, condiciones especiales para endeudarnos, nos vendían lo que eramos capaces de gastar y lo que no, nos decían  aproveche el momento, compre una casa, que en 10 años valdrá el doble, y ahora ademas le financiamos el 100 % y podrá comprarse el coche de sus sueños y también se lo ponemos en la hipoteca. Que ingenuos fuimos, la verdad es que a día de hoy, esas casas valen la mitad, pero la deuda es la misma, y da igual lo que ganemos, el nivel de vida que llevemos, porque esto ha afectado a todas las escalas, algunos han perdido un piso pequeño, otros uno con jardín  otros un chalet en una urbanización de lujo, otros un yate y una mansión  y todo por no saber sobre lo único que es fundamental en la vida, QUE HACER CON MI DINERO.
Los que tenéis la suerte de conservar vuestras casas, enhorabuena, ahora solo tenéis que seguir trabajando durante 40 años mas y con suerte, antes de morir, será vuestra. Siento ser así de duro, pero esa es la realidad.
Reflexionar un poco al respecto y decirme si estar obligado a trabajar hasta casi la muerte para pagar una gran deuda contraída, no es lo que hacían los esclavos siglos atrás.